La serie SL de autos deportivos de Mercedes Benz nació a mediados de los ’50 con los modelos 190 SL y 300 SL, basados en los exitosos automóviles de competición Mercedes Benz de principios de década. En 1963 ambos fueron reemplazados por el modelo 230 SL, más ancho y angulado que sus predecesores. El motor de este modelo fue progresivamente agrandado a 2,5 litros y luego a 2,8 litros al finalizar 1967 (280 SL). El 280 SL estuvo en producción hasta la primavera de 1971, produciéndose 23.885 unidades. Muchos expertos consideran que este fue el último verdadero deportivo de Mercedes Benz en décadas anteriores. Este modelo es también denominado “Pagoda”, por su parecido con las construcciones orientales de ese nombre al estar con su techo duro instalado (el centro del techo es ligeramente más bajo que sus costados). El auto cuenta además con una capota de tela, utilizable en períodos veraniegos. El Pagoda fue diseñado por Paul Bracq, quien también diseñara el mítico 600.
El motor del modelo de la foto es un 6 cilindros en línea, con 2.778 cc e inyección mecánica Bosch multipunto de combustible (proporcionada por una bomba adaptada de las de motores diesel), que desarrolla 170 hp. Cuenta con frenos de disco en las cuatro ruedas, y suspensión trasera independiente. Su velocidad máxima alcanza los 210 km/h.