Los Cadillac de la serie 62 son los más conocidos que ha producido la firma jamás. La serie 62 reemplazó en 1941 a la serie 70 y fue producida hasta 1964, pasando por varios nombres que incluyen la serie 6200 y el modelo Calais. La serie 62 es una perfecta representación de cómo los vehículos evolucionan a lo largo de los años, dependiendo de qué vende y las opciones disponibles. Cadillac comenzó con un motor relativamente pequeño que creció y lo llevó a ser un modelo poderoso al final.
El diseño del Cadillac 1949 fue dirigido por Harley Earl; los tapabarros y aletas traseras estaban inspirados en el avión de guerra P-38 de la Lockheed Lightning. Mirándolo desde lejos, Cadillac las tenía todas en 1949, pues el año anterior había incorporado un diseño nuevo con aletas, lo último del diseño de Detroit –que impresionaban en su momento, pero que finalmente serían copiadas por toda la industria-. El año 1949 sería el último en que Cadillac utilizaría el parabrisas partido por el medio.
Gracias a su brillante y nuevo motor V8 con válvulas a la culata, el convertible de la foto se destacaba por sí mismo. Contaba con 5.400 cc y 160 hp, con una compresión de 7.5:1 que podía ser fácilmente aumentada.
Los vidrios eléctricos eran estándar en este modelo convertible, del cual se produjeron cerca de 8.000 unidades en el año.