Rally Aventura, 27 de Octubre al 4 de Noviembre 2018

Este rally significó la culminación de probablemente la mas dura aventura que ha emprendido el club, el recorrido se inició en Antofagasta desde donde subimos en una primera etapa a Calama.

Desde la altura de Calama se emprendió el duro cruce hace Bolivia vía Ollagüe, en Bolivia nos esperaban duros caminos de tierra y alturas de hasta 4500 m, que mas de alguna víctima significaron en el camino, pero que gracias la gran solidaridad del grupo y la meticulosa preparación previa, todos los autos y participantes pudieron llegar a la Ciudad de Uyuni, ubicada a 3600 m de altura.

El día siguiente fue de aclimatación y una primera aproximación a nuestro gran objetivo, el salar de Uyuni, el mas extenso y alto del mundo.

El día siguiente, con las fuerzas ya repuestas, partimos al amanecer para enfrentar el duro desafío de cruzar hacia Chile a través del Salar de Uyuni. Al iniciar el recorrido no imaginábamos la belleza del paisaje ni lo duro que sería el recorrido, El Salar de Uyuni se nos presenta como un interminable mar blanco, solo las cadenas montañosas lejanas nos daban alguna pista de nuestra dirección. Después de varias horas a toda velocidad en nuestras burras llegamos a un cordón montañoso que se intercalaba con pequeños salares secundarios, después de trepar con nuestras burras empinadas cuestas de tierra, pasar por valles de arena, donde nuestros autos se lucieron enfrentando las difíciles condiciones del terreno, casi imposibles para ser honestos y después de hacer una pausa para comer algo, recargar combustible y hacer reparaciones, creyendo que lo mas duro había pasado, nos enfrentamos al segundo salar que debíamos cruzar, el Salar de Coipasa.

Nuestra sorpresa fue mayúscula cuando ya entrando al salar por un camino de tierra sobre sectores pantanosos, nos dimos cuenta que el salar se encontraba parcialmente inundado por lluvias recientes. En ese momento la decisión fue difícil, pero ante la realidad que ya teníamos varias horas de atraso respecto a lo planificado y no era factible utilizar caminos alternativos ya que implicarían muchas horas mas de recorrido, decidimos continuar por el Salar aunque estuviese inundado. Nuestros guías expertos Bolivianos nos dieron todas las recomendaciones para manejar en estas difíciles condiciones, no salir de la huella que ellos irían dejando, no acelerar ni frenar de manera brusca. Probablemente este fue el momento mas duro del recorrido, el agua salada se colaba en nuestros automóviles, tapaba los filtros de aire, causaba estragos en el encendido de los motores, lo que significó constantes paradas para poder destapar, limpiar y poder seguir adelante.

No obstante todas las dificultades, la impresionante caravana avanzó presentando un espectáculo surrealista. Este espectáculo llamó la atención de una patrulla de fronteras del ejercito Boliviano, quienes, incrédulos, procedieron a interceptar la caravana y revisar exhaustivamente la la documentación de los automóviles y tripulaciones, de la incredulidad pasaron a la admiración por la hazaña que estaban presenciando, no sin antes significarnos un nuevo retraso en nuestra programación que nos hacía prever que sería imposible llegar a la aduana antes que la cerraran.

Los últimos cientos de kilómetros después del Salar de Coipasa no fueron menos duros, no podemos hablar de caminos, eran huellas entre las montañas algunas rocosas, otras de arena, el moderno 4 x 4 de nuestros guías y los vehículos de apoyo se vieron en grandes aprietos, pero nuestras burritas seguían avanzando sin dar tregua. Lo duro del camino tomó algunas victimas, pero como siempre salimos adelante con la destreza mecánica del apoyo técnico y de muchos de los participantes del Rally. Finalmente después de casi 14 horas de recorrido llegamos a la aduana Chilena que acababa de cerrar… Pero al ver nuestros añosos autos, completamente blancos por la sal de Coipasa, al igual que muchos de los conductores y copilotos, nos atendieron especialmente, lo que permitió que llegásemos a Colchane a tener un merecido descanso.

Recién en ese momento nos dimos cuenta de la increíble hazaña que habíamos realizado, habíamos recorrido en automóviles de promedio 90 años de antigüedad caminos que los mas modernos 4 x 4, motocicletas y vehículos de competencia (como los del Dakar) tenían serías dificultades para recorrer, y todo esto sin ninguna baja! Todos los autos llegaron por sus propios medios.

Al día siguiente tuvimos un cambio de planes, debido a un fuerte sismo existía la alta posibilidad que el camino que teníamos planificado hasta Putre por el altiplano estuviese cortado, por eso se decidió ir directamente a Arica, donde llegamos un día antes de lo planeado, en Arica tuvimos la gran sorpresa que el Club de Automóviles Antiguos de Arica nos recibió con un espectacular Almuerzo al día siguiente de nuestra llegada. Desde Arica volamos a Santiago y nuestras fieles burritas fueron embarcadas en los días siguientes con destino Santiago y Antofagasta.

Rally Aventura, 2018

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